
Vocalizo a diario como si mañana tuviese un concierto. Sincronizo siempre los tres puntos claves: caída de mandíbula, colocación del sonido y apoyo. Selecciono lo que me gusta cantar y corresponda a mi tesitura. Fraseo el texto cuidando la pronunciación. Solfeo los intervalos sin lirismos. Agrego el texto a los intervalos, sin lirismo. Cuando fluyen los intervalos marco las respiraciones. Trabajo luego los matices. Agrego el acompañamiento pianístico. Disfruto!
"No soy la mejor soprano del mundo, soy una soprano del mundo que disfruta mucho su trabajo".
"No soy la mejor soprano del mundo, soy una soprano del mundo que disfruta mucho su trabajo".

La técnica vocal es difícil, comprenderla es bendecir a todos los Dioses!
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